lunes, 5 de marzo de 2012

Viviendo, mejorando y disfrutando!

" No hay nada más difícil de aceptar que la realidad "

Hace dos años que me dieron la noticia que cambió mi forma de ver el mundo. Nunca imaginé que una sola palabra me trastocaría tanto.
A día de hoy aun pienso en la manera en que me lo dijeron. Con el Scaner en la mano, esperando a que me dijeran si me tenian que operar el hombro porque se me salía... "Te tengo que dar dos noticias. La primera es que el hombro está bien. La segunda es que tienes un tumor enorme en el húmero"... Mi contestación ante esta noticia fue " Jajajajaja... Venga ya!" y él con cara muy seria me espetó: "nunca haría bromas con un tema como este", y vamos si tenía razón.
La verdad es que no creo que fuera la mejor forma de decirlo, pero a día de hoy aun no se cual sería la forma más idónea para decir algo así.
Cuando te dan una noticia de este calibre, muchas cosas pasan por tu cabeza, ese día es un runrún constante, ya no solamente para ti, sino también para todos los que están a tu alrededor.
En ningún momento me paré a pensar que fuera maligno, y por tanto cáncer, nunca me permití a mi misma concebirlo como una opción. Siempre he sido más bien negativa, o muy realista, pero en ese momento fui la persona más positiva que pude ser.
Los meses de pruebas, consultas, médicos y más médicos, no hicieron otra cosa que alargar el proceso... hasta  que me hicieron la biopsia pasaron 4 meses, que se dice pronto.
Hubo gente que lo pasó muy mal, mucho peor que yo, en mi casa parecía que era la que mejor lo llevaba, salvo por los dolores... cuando un tumor está dentro de tu húmero comiéndose el hueso por dentro no es placentero, creedme, aunque haya gente que piense que porque el apellido de tu tumor sea benigno es menos que un rotura de tobillo, que haberlos...
El alivio no vino con saber su apellido, sino cuando lo extirparon, al día siguiente que España ganara el mundial, lo recordaré mientras viva, vi la final en el hospital con globos rojos y amarillos por los pasillos, enfermeras con las caras pintadas, y médicos con las banderas de España en las batas colgadas... y a las 9 entraba al quirófano... Pero tema operaciones en otro post, jajajaja
Tras un mes de Julio matador, el cabestrillo es lo que tiene, empecé la rehabilitación... largo proceso, 8 meses casi, muy duro, con dolor, etc... Pero dando el callo, hasta q se volvió a salir me bendito hombro, y ya era la sexta vez...
Todo esto lo escribo, ya no sólo porque a mi me merece la pena recordarlo, sino para que toda aquella persona que pueda leerlo sepa que hay que ser positivo, que hay que luchar, dando igual lo duros que sean los golpes que te de la vida. Los sentimientos confluyen dentro de ti en este tipo de situaciones, pero son piedrecitas en el camino que hay que aprender a saltarlas, rodearlas... en fin... superarlas.
Yo no soy ejemplo de nada, ni quiero serlo, sólo cuento mi experiencia con un Encondroma gigante...
No me las doy de persona más fuerte que nadie, ni más dura, ni más curtida... ni mucho menos, soy una persona normal y corriente, con muuuuchos defectos y un puñado de virtudes, una de ellas es poder contar a mi alrededor con gente fantástica que no deja que te caigas por mucho que duela, una persona que ha tenido que pasar por unas determinadas vivencias que no todo el mundo vive, gracias a Dios, y que ha intentado aprender de todas ellas.
La vida puede ser muy corta, por eso hay que aprovecharla, intentar hacerla maravillosa, y poder acumular experiencias... a día de hoy me arrepiento de aquellas cosas que no hice, porque de las que he podido hacer, de todas me llevo algo.
Si, me han quitado un tumor. Si, me vaciaron el húmero. Si, tras 8 meses en rehabilitación me volvieron a meter a quirófano. Si, llevo otros 9 meses más... Pero no me mires con cara de pena, yo no quiero dar lástima, es lo que me ha tocado vivir... y aquí estoy... viviendo, mejorando cada día un poco, y disfrutando de este regalo!!





1 comentario:

Anónimo dijo...

Gran ejemplo,sabias palabras!!!no more coment